Babas teatrales.

Ayer volvi sensiblemente feliz de teatro.
Hasta las lagrimas con Jorge en el colectivo.
Sucede que los extrañaba mucho (si, soy una ternurita). Cuatro, cinco semanas sin ir a clases, mas o menos. Un horror, nunca mas.

Vuelvo y reaparecen los desaparecidos -algunos... todavia nos preguntamos donde estara el chileno, jaja... Y el de Nueva Zelanda!-, vuelvo y hay mas nuevos geniales.

Y si, porque vuelvo y me hacen contar cosas lindas, contar cosas feas. Me hacen sentir desenvuelta en todo. Y si les tengo que inventar unos fines de semana eroticos, donde me invitan tragos cubanos y me estampan contra paredes y las tiritas de la musculosa se me van bajando -el tema era improvisacion de diario sexual, claro-, se los invento, se los melimeleo y pongo la voz que haga falta poner.

Y si me dan la responsabilidad de hacerlos entrar en calor los hago chiquititos, bolitas en el lugar, para saltar y crecer de golpe. Ser olas, ser saltitos pequeños, ser rotaciones corporales.

(Como nos hace gritar Silvia! Mano al hombro izquierdo, estirarla para el lado derecho al grito gigante)

Y si a todo. Si a Dalila que volvio con todos y con todo a pesar de los malos mambos que esta llevando (fuerza, negra!), si a Victor que me hace sentir su nieta mas chiquita, si a Vero que ya es parte de mi columna, si a Pablo que me sigue todos los juegos fuera de la clase, si a Sabri que vende Besos Profundos como el plato del dia, si a Horacio y no a su dolor de panza, si a Maria, a sus comentarios acidos y a sus personajes histericos, si a Jorge y a su energia, si a Anya y a su voz de madre buena, si a Betty con sus multiples nacionalidades, si a Hugo bailando coreografias de la tele, si a Rocio y a sus cuatro años de convivencia, si a Melisa que ayer falto, si a Silvia con su vida llena de cosas, si a Henry que nos exige, que se enoja, que se rie de las perversiones y se enoja con los chistes faciles.

Sere una estupida maricona, sere una chica ocupada,
sere la que no reconocen -algunos- en la oscuridad,
sere una inmigrante cubana
menor de edad, ilegal y
explotada, pero los quiero
mucho.